Pequeña casa antigua en una gran parcela
Encontramos una pequeña casa antigua en una gran parcela, llena de movimiento y ruido. «Quiero un espacio de paz, en el que la gente pueda relajarse, aprender, bailar, rezar…» dijo ella. Con poco presupuesto, pero fuertes intervenciones diseñamos un microclima: una pequeña sala multiusos rodeada y protegida por su jardín, que tamiza las vistas y el ruido del mundo exterior. La ambición de un proyecto que va más allá de su presupuesto nos lleva a pensar, con materiales asequibles, soluciones baratas pero potentes e interesantes. Con ellas transformamos el lugar y sus preexistencias.